Thursday, March 30, 2006

Greetings US visitors!

So, as it's fairly obvious, I had to communicate in English during my trip, especially to all the members of the group I was with. 18 people, all from different countries, which was great. I had the chance to meet them all, and to spend some time and learn from them. As a foreing affairs officer, I am always fascinated by what is different to me. And surprised when I find that most of the time there is a big common ground that allows us to interact and to go farther than the polite talk.

The group was a great array of characters, besides the geographical origin. In three weeks I think I forged friendships I hope will last for many years, although we might not have the chance to see each other so often. If they ever visit this blog, I wanted to say thank to all of them, for their good humour and time.

I have great memories of the trip, and most of them are due to the fact that I was in such great company. Of course the lectures and presentations were interesting and useful, and... but how can I forget the time Finland, Germany, Hungary, Serbia, Taiwan and I spent in the pool and spa at the El Paso hotel? Overall, boys and girls, after three and a half weeks, the lack of sleep was well worth it. After all "we could sleep on the plane", right?

As Taiwan said, the only thing we can regret is that the program is over, and that we will not spend more time together. Hitto soi con!!! (Finnish for "damn it!", I hope the spelling is not too wrong, M)

Wednesday, March 29, 2006

Impresiones del Imperio. Parte Uno: el Factor Humano

Y bien, a lo prometido...

El viaje a Estados Unidos fue una invitación del gobierno norteamericano, un programa de conferencias sobre políticas antiterroristas que incluía sesiones en Washington, Oklahoma, Texas y NYC, junto a un grupo de 18 personas de todas partes del mundo. Vi muchísimas cosas muy interesantes, tanto desde el punto de vista de los contenidos de las ponencias como en lo que se refiere a la sociedad norteamericana. Pude apreciar la realidad de las grandes ciudades y los centros de poder (Washington - NYC), así como ciudades importantes pero con un gran sentido localista (Dallas) y un poco de lo que llaman "little town America" (El Paso - Oklahoma), aunque ninguna de las dos es realmente "little".

Tal vez aquí debería aclarar que todos estos comentarios no pretenden ser apreciaciones ni remotamente objetivas, sino simplemente impresiones que son tan parciales como honestas, como un viajero ingenuo en tierras desconocidas. De hecho es sólo la tercera vez que he estado en USA, y es lejos la más larga de ellas.

Lo primero que debería decir es que Estados Unidos no es un país. Al menos como nosotros los latinoamericanos lo entendemos. Si puedo resumir lo que percibir, diría que USA es un montón de localismos unidos por una ideología. Esa ideología es la que todos conocemos: el país libre de los padres fundadores, de la igualdad y de la conciencia (o artículo de fe) de que EEUU es un oasis de paz y estabilidad en el medio de un mundo donde campea la corrupción, la inestabilidad y la falta de democracia y libertad.

Una de las sesiones consistió en una reunión en Dallas con un periodista de actualidad. Yo estaba preparado para preguntarle su opinión acerca de la realidad de Estados Unidos, las políticas impulsadas desde Washington, el papel de la administración Bush en el huracán Katrina, etc., etc. A todas mis preguntas, el periodista me respondía con una mirada un poco extrañada, aclarándome que "esos son asuntos federales", o sea, que todo lo que no fuera su realidad local era excéntrico a su interés. Al comentar esta reacción a amigos locales, se me recordó de inmediato el viejo dicho norteamericano que reza "All politics are at the end local politics".

Esto es tal vez muy extraño para un chileno como yo que viene de un país absolutamente centralizado y donde los temas nacionales son siempre primera plana. En cualquier caso, encuentro fascinante que la potencia que domina el escenario mundial tenga un nivel tan alto de localismo. En 1823 el Presidente Monroe ya adelantó la doctrina que lleva su nombre: "América para los Americanos", que traducida al día de hoy equivale a decir que la realidad social y política de los Estados Unidos es suficiente para mantener ocupadas las mentes de sus habitantes (excepto para minorías ilustradas o curiosas), y que lo que provenga de fuera cae en una categoría informe de "lo extranjero", que en el caso de EEUU es más grave porque existe la conciencia de que cualquier cosa que no sea local es menos desarrollada, más pobre, menos relevante.

En El Paso, una ciudad de tamaño medio, hay una mezcla feroz de la cultura americana - europea con lo mexicano. Coexiste una población enorme de mexicanos con lo más tradicional de EEUU. Nuestro grupo fue invitado por una organización que se dedica a recibir a visitantes oficiales como nosotros, una cena informal con comida casera, algo tex-mex, con gente muy agradable. Lo que es interesante es que a pesar de que es una comunidad en que los bicultural ha convivido por muchas décadas, aún hay una forma de relacionarse y de percibirse como "ellos" y "nosotros". Lo mexicano y lo anglosajón es aún claramente distinguible, uno de otro.

Lo segundo que me llamó la atención es lo incorporado que está en la sociedad el estilo de vida conservador. Las familias viven una vida marcada por la vida comunitaria, donde los individuos no son separables de sus entornos y donde la religión (cualquiera sea la iglesia) tiene una presencia muy importante. Tengo la impresión de que esta forma de ser no tiene tanto que ver con las preferencias políticas como en otros países como Chile, donde aquellos de pensamiento político más liberal son en general más alejados de la iglesia y de normas más tradicionales de relacionamiento social.

Al final del viaje, no puedo realmente decir si las personas que conocí son realmente representativas de la sociedad norteamericana en su conjunto. Ciertamente Nueva York, con su estilo de vida cosmopolita, liberal y abierto, no lo es. En cualquier caso, estas son mis primeras impresiones, y al momento de dejar Estados Unidos entiendo un poco más la tragedia de una super potencia que tiene intereses globales pero que es incapaz de entender el mundo, no por una ausencia de voluntad, sino que debido a que ve todo a través del cristal de su propio localismo y convenciones sociales, que consciente o inconscientemente considera superiores a las realidades de otros países. Un general del ejército norteamericano nos dio una charla sobre la política de EEUU en Irak y métodos de prevención del terrorismo. Nos mostró unas fotos de niños palestinos con explosivo en sus cinturones. Su comentario consistió en decir que a él no le gustaría que sus hijos volvieran así del colegio. Quise intervenir, pero no lo hice. Quería decir que no basta con horrorizarse con tan terribles realidades. Que es necesario entender desde la propia realidad de la resistencia palestina por qué ocurre algo tan triste, que no sirve de nada preguntarse por qué los padres de esos niños no reaccionan como lo haría un padre norteamericano promedio, tradicional en su pensamiento y cercano a la iglesia. No hablé porque sentí que no me entendería.

Tuesday, March 28, 2006

De los por qué de esto

Y bueno... podría dar muchas razones, pero supongo que la mejor es que llenando estas líneas satisfago una necesidad que he tenido por mucho tiempo, es decir, de expresar lo que pienso. Al mismo tiempo, cumplo la máxima de "si te gusta léelo, si no te gusta me da lo mismo". En otras palabras, siento la necesidad de poner mis opiniones en alguna parte que no sea la almohada o el bar de la esquina, sin preocuparme de que la "publicación" vaya a ninguna parte en especial. Hablar en público sin necesidad de que alguien te escuche. Suena casi contradictorio, pero supongo que al sumarme a este medio de comunicación le estoy dando la razón a todos los millones de bloggers que hacen exactamente lo mismo: un desahogo terapéutico de dramas, desilusiones y alegrias bien ganadas.

Tambien es escribir con total libertad. Mientras pensaba en cómo darle forma a este blog y qué cosas pondría en él, me di cuenta de que para mi (y sospecho que para muchos más) uno escribe con más libertad cuando está solo. Sin la tiranía del destinatario la pluma (o el teclado) se mueve con mucha más comodidad, lejos de sutilezas y sobreentendidos. Y mi conclusión es que el mundo Blog es como un espejo oscuro de una realidad brillante (o viceversa), donde volcamos todo lo que realmente queremos decir, donde las cortapisas de la convivencia aprendida no tienen mucho lugar.

La declaración de principios seguirá otro día, creo que irá saliendo a medida que subo posts. Acabo de volver de 3 semanas en Estados Unidos en un curso invitado por los gringos, que fue absolutamente espectacular. Tengo muchos comentarios que hacer al respecto, que iré subiendo en los días siguientes.